sábado, 28 de noviembre de 2009


Dia: 28 de Noviembre
Titulo: Examenes
Made in: Pia
Esperando a: Una amiga...

... Epoca de exámenes. Angustia. Examenes, examenes, examenes. Buff... Tres mil millones de examenes en una semana. Tiempo para la vida social: Ninguna Tiempo para la vida cibernética: Ninguna Tiempo para estudiar: 100% de todo. Los examenes chupan todo lo que encuentran como amigos, cenas familiares y entrenamientos de baloncesto. Todo. Todo y nada. En eso se convierte. Y cada día, cada hora, cada instante dado para los examenes. Llega el examen. Resulta que es despues del recreo. Bien. Más tiempo para estudiar. Llevas toda la semana estudiando pero aun así, el tener un rato más me alegra. Estudiando se ma pasa el recreo en un pis pás. Llegamos a clase. Me empiezo a poner nerviosa. Dulce locura. Saco el libro y empiezo a repasar lo que acabo de repasar miestras bajaba las escaleras. Llega el profesor. Nervios, nervios y más nervios. El examen del siglo, el más difícil del año que llevo estudiando toda la semana y hace un mes que me reconcome la conciencia para estudiar. Me lo sabía como si tuviera el libro en la cabeza. Cada palabra, cada abreviatura, cada preposición. Todo. Todo y nada. Puesto que cuando me dieron el examen, cogí el bolígrafo, fui a escribir la primera palabra y todo se esfumó. Siempre lo mismo. Media hora de pensamientos inconexos sin resultado. Hasta que vuelve todo de dar un paseo y empiezo a escribir como loca. Menos de media hora para hacer un examen de dos paginas. Me sale la letra de medico que te sale cuando escribes muy muy rapido. Al final, todo acaba bien. El profesor a primera vista se sorprende. Primero, por que lleva viendome casi toda la hora parada pensando, que no suele pasar. Segundo, por la letra. A primera vista no la entiende ni Dios. Despues, empieza a descifrar jeroglíficos, como en Egipcio. A la semana, entrega los exámenes. Un 10. El esfuerzo sirvió. Valió la pena. Por detrás, una nota del profesor; "Intenta hacer la letra un poco más legible". El colmo.

martes, 17 de noviembre de 2009

Dia: 17 de Noviembre
Titulo: Preguntas
Made in: Pia
Esperando a: Mi madre
¿Para qué vivimos? ¿Sabemos para qué vivimos? ¿Porqué? Es difícil averiguar el sentido de la vida. ¿Vivimos para... ser felices? ¿Para... ser amados? ¿Para vivir en un seno familiar donde haya fe y amor? Preguntas, preguntas y más preguntas, pero ninguna con respuesta. Los patitos cuando nacen y salen del huevo, creen que sus madres son lo primero que ven. ¿Seremos nosotros así pero con otras cosas? Monotonía y más preguntas. Cansino y vuelta a empezar. ¿Tal vez? No. En cuanto desarollamos más preguntas, es como caminar sobre una cinta mecánica; caminar en vano, porque nunca llegaremos a dar los pasos suficientes para volver a pisar un suelo firme de respuestas a nuestro alcance, nunca hay respuestas. Esto nos hace decepcionarnos y hacer lo cotidiano sin ganas. Tantas preguntas para tan pocas respuestas. Por eso yo siempre digo que somos unos perseguidores de la perfección. Sin saber todas las preguntas, nos concomeremos el cerebro hasta hacerlo añicos sobre un suelo de gran incertidumbre, sin la seguridad de saber qué nos pasará o porqué estamos aquí. ¿Nos acabaremos cansando? Puede... Cansino y vuelta a empezar ¿Tal vez? No. Y las preguntas vuelven y vuelver. Nos matan por dentro hasta volvernos locos. Me muerde y me destroza, toda es siempre poca. Me mata y me remata. Si. Entonces, despues de toda esta filosofía de la vida que nunca llegamos a comprender, no hemos llegado a nada. ¿Para qué vivimos? Cansino y vueñta a empezar. ¿Tal vez? No

domingo, 15 de noviembre de 2009


Dia: 15 de Noviembre
Titulo: La linea
Made in: Pia
Esperando a: Nadie en particular...

La linea entre la vida y la muerte es muy debil. Si no la alimentamos, llega un día en el que está totalmente desilachada y solo le queda un muy fino hilo que sujeta todo ese peso. Alimentarlo de vida, alegría, salud, felicidad, buen vivir, vida sana... Sino, serás malamente tratado por la muerte. Si, ese esqueleto andante que se cubre por un manto negro y que nos persigue cuando nos llega el momento... ¿Preferimos vivir? Eso ya es asunto de cada uno puesto que somos completamente capaces de saberlo. Somos tan egoístas, que seriamos capaces de ir del cielo al infierno, de la vida a la muerte, del bien al mal... en apenas 5 milésimas de segundo. ¿Causante? Egoísmo, perfección y alta calidad. Queremos vivir tan bien que se nos mete en la cabeza y no se nos va, causando todos esos traslados del absoluto placer y serenidad al horroroso ego de cada uno. Si, hay que saber admitirlo como buenas personas que somos. Pero, ¿y cuando no nos llega la hora y a la muerte le entra el placer de arrebatarnos la chispa de vida que nos queda injustamente? Nada, nada de nada. ¿Sabemos a caso cuando nos llega nuestro fin? ¿Sabemos acaso si a la muerte se le ha antojado o somos nosotros los que no queremos creerlo y aceptarlo? Lo que digo, perfección. No aceptamos lo que nos pasa o nos ha pasado, vagando por el mundo insólito de humanos con regocíjo mientras nuestra depresión se alimenta hasta la última gota de nuestro cuerpo vagante. Lo primero que habría que hacer al morir, sería aceptar todos los males que hemos hecho y causado y aceptarnos a nosotros mismos, tal y como somos. Pero, ¿acaso lo aceptamos? No. Egoísmo y Perfección. Nuevas vidas quieren ya llegar a La Tierra pero no las dejamos llegar. La linea entre la vida y la muerte es muy debil.

sábado, 14 de noviembre de 2009

Dia: 14 de Noviembre
Titulo: El trovador dolorido
Made in: Pia
Esperando a: My love

Me desperté y tenía un fuerte dolor de pecho. El dolor no cedía y mi corazón muy fuerte latía. Yo no sabía por qué sería, pero la pregunta estaba mal formulada, por QUIÉN. Días antes del horroroso dolor, mi bella Dulcinea, siendo yo el Quijote, me había respondido ante la declaración de mi amor. Mi dama contestó que no estaba enamorad de mi, estaba loca por mi fiel acompañante, Sancho Panza, que se había convertido en mi mejor amigo. ¿Había mi bella Dulcinea traicionado mi amor o sería Sancho Panza el que me hubiera traicionado ante nuestra larga y extensa amistad? El caso es que desperté con aquel dolor insoportable; y sabía como remediarlo. Fui caminando hasta la humilde morada de mi dama y le pedí que pensara más en mi. Sancho Panza era mi mejor amigo y no quería que nuestra amistad se rompiera en muchos muchos trocitos de corazón roto. Por ello, le dije a mi bella Dulcinea que se lo pensara mejor. Después, fui a visitar a mi fiel amigo Sancho Panza, que prometió no robarme mi querida dama. De repente, Dulcinea mi amor llegó a pie hasta donde estabamos mi fiel compañero y yo y, hablando en privado, me respondió que lo que ella sentía hacia Sancho Panza era demasiado. Yo, con el corazón roto, respondí que era igual y los junté. Mi fiel ayudante en realidad estaba muy enamorado de mi bella Dulcinea pero no quería decirmelo con motivo de no partirme el corazón. Los dos se cogieron de la mano y se fueron hacia el horizonte, con la expléndida puesta de Sol rozando sus rostros. ¡Ay, fuerte dolor de pecho! ¿Habré caído ante tu tentación? Espero no volver a morirme por los huesos de otra resplandeciente señorita. Una hermosa chica en ese momento pasa por delante de mi y echa una mirada pícara. Volví a caer ante sus brazos. ¡Ay, fuerte dolor de pecho! ¿Habré vuelto a caer en tu tentación? Quedé iluminado por un precioso poema que en mi mente se desarolló. Sobre la cama lo escribí y al acabar, me dormí. Al día siguiente ... Me desperté y tenía un fuerte dolor en el pecho.